sobra tanto dentro de este corazón

Es tan dificil expresar esto con palabras. Es...es como una canción que suena justo en el momento adecuado. Es como la melodía de tu vida. Es como el momento de adrenalina al subirse a una montaña rusa. Es como una carrera de motos. Es como sentirse libre. Es como manejar el mundo con solo dos dedos. Es como poder gritar donde y cuando quieras. Es como que el sol te ciege en verano, o como dar un paseo por la nieve en invierno. Es como el sabor de tu helado preferido. Es como un chocolate caliente en plena noche de diciembre. Es como el calor que te da una chimenea. Es como encontrar el sentido de la vida en tan solo unos ojos. Es como sentir, vivir, perder la cabeza...Eso es el amor, amor eres tú.

                                                                                                                                                   Raquel

a punto de perder la compostura.

El miedo es como la familia, que todo el mundo tiene una, pero aunque se parezcan, lo miedos son tan diferentes y tan personales, como pueden serlo todas las familias del mundo. Hay miedos tan simples como desnudarse ante un extraño, miedos con los que uno aprende a ir conviviendo. Hay miedos hechos de inseguridades, miedo a quedarnos atrás, miedo a no ser lo que soñamos, a no dar la talla. Miedo a que nadie entienda lo que queremos ser. Hay miedos que nos va dejando la conciencia, el miedo a ser culpables de lo que les pase a los demás, y también el miedo a lo que no queremos sentir, a lo que no queremos mirar, a lo desconocido. Como el miedo a la muerte, a que alguien a quien queremos desaparezca. Y hoy he escuchado a un señor en la tele, un señor encantador, que decía que la felicidad es la ausencia de un miedo. Y entonces me he dado cuenta de que últimamente, yo ya no tengo miedo. Librarse del miedo es como quitarse la ropa delante de alguien, a veces cuesta, pero cuando empiezas lo único que tienes que hacer es seguir, sin dudar, y de repente te das cuenta de que el miedo ya no te pertenece, ha desaparecido, como esa ropa que un día dejas de usar.

Le he dado un cambio al blog, de vez en cuando me gusta renovar las cosas, ¿qué os parece?

                                           Raquel

iría hasta el fin del mundo con tal de encontrarte

Arriesgado es jugarsela a todo o nada. Arriesgado es confiar en los demás. Arriesgado es entregarle tu corazón a la persona equivocada. Arriesgado es hacer caso a los impulsos del corazón. Arriesgado es romper las normas. Arriesgado es quererte, quererte más de lo que es bueno. Pero que le vas a hacer, me encanta correr riesgos, chico.

                           Raquel

                        

F_ _ICIDAD, SOLO ME FALTA ÉL

Tu puedes hacer que todas las canciones sean bonitas. Puedes hacerme perder la cabeza y encontrar otra cosa. Eres el único con el que una mirada significa un mundo. Puedes transmitir más cosas con solo un susurro al oído que cualquier poema de Neruda. Me haces sentir que soy mejor persona junto a ti, que escondida en tus brazos el mundo es mucho más pequeño y menos duro. Gracias a tí se que no existen límites más allá del cielo, y que puedo tocar las nubes en cualquier momento. Y es que, de veras, el mundo debajo de tu cama era tan pequeño...

                         Raquel

No hay nada más bonito que un recuerdo, pero tampoco nada más doloroso.

Una vez le preguntaron a Lewis Hine, un fotógrafo de guerra, que porque había elegido esa profesión, el contestó que si pudiese contar con palabras todo lo que veía, no necesitaría cargar todo el día con una cámara de fotos... Que ciertos momentos de belleza, de desolación, de horror y de heroísmo estaban más allá de las palabras. Yo también lo creo hay cosas que no podemos explicar con simples palabras, cosas como seguir vivos, sentimientos como el amor y el compromiso o sensaciones como volver a abrazar a un amigo. Quizá por eso nuestra vida se compone de imágenes, momentos congelados en el tiempo para siempre, de decisiones que cambian sin remedio el rumbo de las cosas, de fotografías fijas guardadas en la memoria que nos recuerdan cada segundo lo hermoso que es vivir.

                                   Raquel

Se llama madurar.

Cuando pienses con seguridad, cuando quieras a alguien de verdad. Cuando no te dejes influenciar, y mucho menos influencies a los demás. Cuando no busques para llenar tu ego. Cuando no humilles para aparentar ser fuerte, y demostrar que te come la inseguridad. Cuando aprendas a distinguir lo que importa, de lo que no. Cuando te des cuenta que jugar conmigo, no es un juego. Cuando vengas, y me digas que la has cagado sin mentir. Cuando sepa que en ti hay algo más que toda la mierda que sueltas por la boca. Cuando aprendas a hablar. Cuando te termines los petitsuis. Me llamas.

                                         Raquel

Soy igual desde el principio y hasta el final.

Soy lo que queda del sol cuando se va, soy la luz que entra por la ventana y calienta tu piel. Soy la ultima calada del día y la primera de la noche. Soy tu imposible, tu talón de Aquíles y tu perdición. Soy todo lo que un día quisiste y si eres inteligente, no querrás más. Soy lo que pocos se atreverán a catar. Soy las burbujas del refresco más refrescante y el alcohol que cura tus heridas a base de amor (entre otras cosas). Soy el jueves que vive en medio de tu vida. Soy la luna, el sol y todas la estrellas. Soy, lo que volverías a hacer.

                                          Raquel

Seré tuya eternamente.

                         "Tú y yo"

                            "Nosotros"

               

                                                                        

                                                                                    Raquel

¡No encontrarás nadie que sepa darte lo que yo te he dado!

Quiero que sepas que no muero por tu boca, que el pasado está pisado y que mi corazón tiene la opción de "Eliminar". Que te quede claro que como tu hay miles y que no pienso perder un solo segundo pensando en todo lo que pasamos juntos. Si tú decides seguir tu propio camino, debes saber que yo no te estaré esperando allá donde vayas.

                        Raquel

Nada puede reemplazarte.

Pasaba horas y horas dibujando corazones en tu espalda, investigando tu piel. Me enseñaste que los límites están donde tu escojas, que el cielo se puede tocar de muchas maneras, que los besos saben mucho mejor cuando hay sentimientos detrás. Aprendí que no importan el como, el donde o el cuando, sino el contigo. Probe el sabor del amor verdadero e incluso me dejé llevar demasiadas veces. Mis sábanas olían a ti, mi ropa olía a ti, mi habitación olía a ti, mis ojos no podían ver más allá de tu sonrisa. Me enseñaste cosas que ni siquiera sabía que existían, me llevaste al paraíso sin salir de tu habitación. Pero todo pasa y se acaba, se quema y se destruye. Aunque donde hay fuego, cenizas quedan, eso está más que comprobado.

                                                                                         
                                                                Raquel